Hace 10 años | Por ordend a elmundo.es
Publicado hace 10 años por ordend a elmundo.es

Tras la muerte del Rey Fahd, Ibiza ha ido relevando a Marbella como sede oficial de los antojos de los guardianes del oro negro más golfos y más pérsicos. Sus huellas fantásticas se aparecen como ectoplasmas, por ejemplo, en la bombonería Daskalidès, desvalijada por su séquito para cubrir el cuerpo de una mujer desnuda; o en una propina de 80.000 euros en el restaurante Lío para una cuenta de 120.000; o en un catering privado del chef italiano Walter Martino facturado por 800.000 euros.

Comentarios

juvenal

Cuando el pueblo de Arabia Saudí se canse de esta sarta de garrapatas que les gobiernan, se va a armar la de Troya

landaburu

Esta es una de las razones por las que veo la utilidad de nuestra monarquía, porque con estos "elementos" de medio oriente se hablan de tú a tú.

p

¡Se comportan como reyes!