Pero desde esta mañana todas las quinielas pueden cambiar por la truculenta historia del pederasta con pasaporte español liberado de la condena a treinta años de prisión en la cárcel de Marruecos tras la importante visita de estado del Rey Juan Carlos y un nutrido séquito oficial como hasta ahora nunca lo ha habido. Una historia de espías mas propia del mundo literario de John Le Carré que del estado democrático y europeo que es o debería ser España. Pero tras el 11 M cualquier cosa puede suceder.
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El rey de Marruecos, Mohammed VI, ha revocado el perdón a pederasta español Galván Viña que fue condenado a 30 años de cárcel por abusar de 11 menores y había sido incluido en una lista de 48 presos indultados. http://goo.gl/u0d5dH