Entre los niños es frecuente encontrar mucófagos. No son criaturas maléficas que chupan la energía espiritual de los padres (o no del todo), sino personas que ingieren mocos. También hay algunos mucófagos entre los conductores de coches, sobre todo después de una larga espera frente al semáforo en rojo y una concienzuda labor de sondeo nasal.
Lo de comerlos, sólo en privado pero siempre había pensado que serían o buenos para las defensas o un motivo para estar resfriado o malo.... y llevo tres años sin tomar ni medicamentos ni antibióticos..... aunque no creo que tengan los mocos mucho que ver
La semana pasada pillé a un reputado catedrático de mi universidad comiéndose disimuladamente las legañas, que supongo que tendrán similar valor inmunológico. Desde entonces le tengo más cariño, se me hizo más humano
Comentarios
Menuda cerdada. Los mocos se han pegado debajo de la mesa, o del asiento del coche, de toda la vida.
#3 Que recuerdos, esos pupitres del colegio, con unas estalactitas que te podían desgarrar los pantalones.
Por fin esa gran incógnita que siempre nos preguntamos por aquí, con una mano en el ratón y la otra en la nariz.
jejeje, esta noticia tiene tantos clics que empiezo a sospechar el hábito de muchos meneantes....
Lo de comerlos, sólo en privado pero siempre había pensado que serían o buenos para las defensas o un motivo para estar resfriado o malo.... y llevo tres años sin tomar ni medicamentos ni antibióticos..... aunque no creo que tengan los mocos mucho que ver
La semana pasada pillé a un reputado catedrático de mi universidad comiéndose disimuladamente las legañas, que supongo que tendrán similar valor inmunológico. Desde entonces le tengo más cariño, se me hizo más humano
Ir al segundo 16 del vídeo.
Peor será no comertelos o que te recuerden cada 2x3: "no te comes ni los mocos"