Publicado hace 10 años por debunker a listadelaverguenza.naukas.com

La historia que contábamos en la entrada anterior sobre una charla antivacunas en la que se involucró al Ayuntamiento de L’Escala encierra dos lecciones: lo que puede llegar a suceder si una institución pública cede sus instalaciones sin verificar mínimamente para qué las está cediendo (como hemos visto otras muchas veces por esta lista) y también que el hecho de dar a conocer estas cosas puede servir para que la institución rectifique.