Es de todos conocido el ‘amor’ y la devoción que tienen algunos por su teléfono móvil, pero lo de este muchacho germano de 16 años no tiene parangón. El joven presuntamente instaló dos bombas eléctricas para secar un pequeño lago de recreo ante la negativa del dueño del idílico paraje de contratar buzos para recuperar el ‘preciado botín’. ¡Ni que fuera el Costa Concordia! Si hace eso por un smartphone (y su agenda de contactos), ¿qué será capaz de ‘maquinar’ por otros motivos?
Comentarios
Este becario no es reptiliano, simplemente es gilipollas.
Mmmmm Interesante.
Si le regalamos un móvil nuevo pero le decimos que está en los fosfoyesos de Huelva, deja aquello limpio como una patena.
Tiene un estilo de redacción que dan ganas de abofetear al becario éste muy fuerte.
Si se le llega a caer en mitad del Atlántico, la que podía haber liado...
Había leído noticias locas y ésta
A mí una vez se me cayó el llavero en un estanque de unos 6 metros de profundidad y aguas más o menos cristalinas. Lo recuperé con un imán de herradura y un pedazo de cuerda, pero claro, yo soy español, no soy alemán.