Hace 10 años | Por darteaga a politica.elpais.com
Publicado hace 10 años por darteaga a politica.elpais.com

El deterioro de las instituciones públicas surgidas de la Transición es tan manifiesto que ya casi nadie lo pone en duda, excepto sus principales beneficiarios: los dirigentes de los grandes partidos, que se niegan a reformarlas. Pero entre las causas hay una que a menudo se olvida: el enorme déficit de cultura democrática que acumula este país.

Comentarios

Catacroc

En Ankh-Morpork tienen ese sistema de gobierno de 'un hombre, un voto', el Patricio es el hombre y su voto es el que cuenta.

Rafaelo

La Transición nunca se interesó por aumentar la cultura democrática de la ciudadanía sino de las apariencias y cosmética democrática

javiblan

En las polis de la Antigua Grecia (a la que los bárbaros del norte no le llegaban ni a la punta del pié), ante circunstancias excepcionales (guerras, epidemias, hambrunas, etc.) se elegía a un dictador o déspota que tenía carta blanca durante un tiempo limitado para hacer y deshacer. Era una excepción a la democracia. Pero nosotros llamamos democracia a la excepción; la elección de un déspota con mandato limitado en el tiempo. Vamos que no somos una democracia en sentido clásico.