(c&P) Soy una de esas personas que siempre he sentido la necesidad de recoger objetos que veo tirados por ahí. En aras de mantener una rareza con la cual disfruto, ahora recojo notas manuscritas que veo por la calle. Muchas son listas de la compra que encuentro en la entrada de los supermercados, pero también otras que la gente deja tiradas en la calle. Este coleccionismo tiene muchas ventajas: sus elementos ocupan muy poco, se obtienen sin coste alguno...pero sobre todo satisfacen ese “factor cotilla” que todos llevamos dentro.
Parece que lo de este es otra cosa: Supongo que si hubiera seguido acumulando objetos podría haber sido víctima del síndrome de Diógenes, que en esos trastornos todo es empezar.
Comentarios
Síndrome de Diógenes literario
#1 Síndrome de Diógenes literario es el nótame.
Parece que lo de este es otra cosa:
Supongo que si hubiera seguido acumulando objetos podría haber sido víctima del síndrome de Diógenes, que en esos trastornos todo es empezar.
Maravillosos los comentarios sobre cada nota. Esto es arqueología urbana de la buena!
Joder... y ahora me estoy rallando sobre las que dejo yo por ahí tiradas... tengo que empezar a cuidarlas
¡Buenísimo! Casi mejor que lo de recolectar fotos encontradas.
Tiene su gracia... te imaginas el contexto de cada una. Es como asomarse un ratito a la vida de otro.