El hijo del ahora exjuez del Tribunal Supremo Anthony Kennedy ayudó a Donald Trump en 2005 a conseguir casi 700 millones en préstsmos para construir un rascacielos en Chicago, a pesar de la reputación de las bancarrotas empresariales de Trump. Según el informe del NYT, Justin Kennedy, que dirigía la división de bienes inmuebles del banco, y era cercano a Ivanka Trump y Jared Kushner, decidió ignorar el pasado como mal deudor de Trump; el futuro presidente avaló personalmente 40 millones del préstamo.
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Este juez se retiró del Tribunal Supremo durante la presidencia de Trump, asegurando un nombramiento del partido republicano. Su puesto fue cubierto por Brett Kavanaugh.
A los votantes se la sopla.
Siempre sale el Deutsche Bank en todas las operaciones extrañas
#3 En este caso prestándole dinero a un tipo que acumulaba bancarrota tras bancarrota: varios casinos quebrados, una aerolínea que fue un fracaso, negocios inmobiliarios sobre los que acumulaba centenares de demandas...
Literalmente, un fulano al que ningún banco estadounidense quería prestarle dinero.