Hace 16 años | Por --65390-- a lavanguardia.es
Publicado hace 16 años por --65390-- a lavanguardia.es

no puedo evitar un profundo sentimiento de rechazo cuando veo las procesiones de Semana Santa. A pesar del color y el abigarramiento de sus pasos, el culto por el dolor y la muerte resulta tan explícito, que me retrotrae al Dios terrorífico que peor transcribe la trascendencia espiritual. Ante esos pasos torturados, eso penitentes sufridos, esos encapuchados, esa cruz pesada, esas gentes que disfrutan en el llanto, me siento una extraterrestre, un ser de otro mundo, alejado de ese mundo enormemente feo, en su manida belleza.

Comentarios

D

Como decía Javier Krahe, "yo es que entrar en una iglesia y ver a un crucificado colgando de la pared....repelus total"

Nos tienen tan intoxicados que hasta los ateos no nos sorprendemos de la barbaridad que supone enseñar una imagen de un crucificado ensangrentado, algo que en otros ambitos sería considerado gore. Todos los niños lo tienen metido en la cabeza desde pequeños. Eso si, luego ver sangre en los videojuegos es malísimo y crea delincuentes.

Mark_

No solo de las religiones, el Hombre en sí, a lo largo de su Historia, ha tenido curiosidad por lo que hay justo después de la muerte, y es una preocupación mucho mas antigua que cualquier religión.

Ahora, que cada una le dé un "significado"...