La doctrina Obama es hoy más clara. Si Estados Unidos tiene intereses cruciales en riesgo, irá a la guerra solo. Si tiene intereses secundarios en juego, irá a la guerra si otros países ayudan. Si tiene intereses contradictorios -por ejemplo, mueren civiles pero el gobierno es aliado- no irá a la guerra. ¿Cómo se decide qué interés pesa más? Depende.
Comentarios
Enhorabuena a @jordipc por el seguimiento en Twitter de las Revueltas Árabes y por la perfecta exposición de la política de Obama.