Hay que olvidar lo que ya está creado y construir cosas nuevas. En un contexto en el que no nos gusta lo que hay, en vez de protestar, tenemos que cambiar las cosas nosotros mismos. Necesitamos explorar qué conceptos y métodos podemos aplicar a soluciones concretas, así como qué tipo de metodología debe sustentar el diseño social. Sin fórmulas cerradas.