La subasta eléctrica determinó que el precio de la electricidad correspondiente al primer trimestre de 2014 debería incrementarse en un 30% al situar el producto base subastado en 61,83 €/MWh frente a los 47,54 vigentes. Se trataba, obviamente de una barbaridad. Una barbaridad que ha tensado demasiado la cuerda y la ha roto