El lunes 29 de febrero del 2016, para mí, no fue una fecha que pasó por el calendario como una más. Durante todo el día se cruzaron por mi cabeza las imágenes del rostro de dos muchachitas, una rubia y una morena, a quienes ni siquiera conocí. Sin embargo, tengo claro el porqué de esta situación: fue debido a que, más allá de que nunca compartí tiempo con ellas, las sentí muy cercanas, como consecuencia de que los tres teníamos un gusto en común: viajar por el mundo.
Comentarios
Claro que sí, tiene que haber derecho a viajar con vagina, coño.
#1 derecho y casi obligación, a España sin vagina que no vengan.
#1 Claro que sí, tiene que haber derecho a viajar con coño, vagina.
#1 exijo igualdad, yo quiero viajar con polla, sin que me criminalicen!!
#4 También es cierto, cojones.
#4
Hombre , si de dejan viajar con gili, que menos que no separarlos
Utilizar la muerte injusta de dos chicas para publicar un artículo vacuo y demagogo, con el fin de quedar como un adalid de la libertad y conseguir audiencia, es vergonzoso. Es otra forma de machismo. Y ahora no vengas a decir que te votamos negativo porque somos unos machistas. El artículo es objetivamente malo e irrelevante.
Pero a ver, ¿vivimos en un mundo heteropatriarcal en el que existe una violencia dirigida desde un sexo hacía el otro o no? Porque si asumimos dicho discurso estamos asumiendo que si, que en efecto, que el mundo es más peligroso para una mujer que para un hombre.
#6 Pues si, no hace falta ser un lumbreras para determinar que el mundo es más peligroso para una mujer que para un hombre
#6 Que la inmensa mayoría de las sociedades asignen una serie de roles predeterminados a individuos por razón de su sexo (que en muchos casos devienen en abusos físicos hacia mujeres) no significa que exista una violencia dirigida desde un sexo hacía el otro.
Ése es un error conceptual que propaga una minoría inculta y alborotadora del feminismo y que sirve como excusa perfecta para las hordas de cuñaos que banalizan el sexismo. Horda con nutrida representación en menéame, por cierto.
#6 Claro que vivimos en un mundo más peligroso para las mujeres que para los hombres (esto no quiere decir que para los hombres no lo sea, pero las mujeres tienen riesgos añadidos por el simple hecho de serlo). A mí, que soy mujer, me encanta viajar y no me importa (incluso me gusta) hacerlo sola. Pero jamás se me ocurriría poner un pie sola en determinados lugares de este planeta. ¿Miedo? No, prudencia. Miedoso es el que magnifica las amenazas. Prudente es el que toma medidas para prevenirlas. Y estúpido, el que las ignora. Y hay destinos donde, lamentablemente, la única medida para permanecer segura es mantenerse alejada. Soy feminista y defiendo el derecho a la igualdad. Pero no tengo vocación de víctima. Las ideas se defienden mejor viva que muerta. Meterte, por ejemplo, en un país integrista musulmán con unos shorts que apenas te tapan el culo y la melena al aire no es reivindicar los derechos de las mujeres, es hacer el gilipollas.
En cuanto al caso de esas chiquillas creo que tuvieron mala suerte y lo lamento mucho por sus familias. Ecuador tampoco me parece uno de esos países de los de "no pongo un pie ni loca", aunque yo no viajaría allí sola (y creo que tampoco lo haría ni aún siendo hombre)
Cuánta estupidez junta, no es ningún derecho, no es algo que un parlamento apruebe, viajando con pene te matarán o te violarán igualmente en un montón de lugares del mundo, así que espabila y mira donde viajas.
#8 Es que quieren las ventajas de tener vagina, pero sin las desventajas.
Hay que saber valorar riesgos, tu podrás tener tu derecho a meterte en una jaula llena de tigres hambrientos, pero deberías de valorar el riego que asumes con ello.
Yo a quien lo ha escrito le mandaba de mochilero a Siria, que tiene buen ambiente en esta época del año y que viaje con vagina, pene o lo que quiera y ahí que compruebe que si, que tiene derecho a ello.