"Seguro que en las escuelas de negocio lo cuentan poco, pero una de las decisiones más espectaculares de la historia del marketing fue del CEO de Mattell, Ray Wagner. A este empresario, en 1976, le pidió audiencia un tal George Lucas, que iba a sacar una película de título Star Wars. Le proponía hacerse cargo de todos los muñequitos de su simpática historia. El CEO declinó la proposición con gran ojo, pues dijo que no a uno de los mayores negocios de la historia. Cuando se dieron cuenta del error, a la desesperada, Mattell intentó compensar...
Comentarios
¡Qué viejunos recuerdos! Modulok era el mejor.
#1 Modulok el puto jefe.
Echo de menos alguno de Hordak y la horda del terror.
Mantenna, Leech, grizzlor, dragstor... también tenían lo suyo. Y ese que era como una peonza.
#2 Rotar se llamaba. Y mirando esta lista https://www.syfy.com/syfywire/every-he-man-and-masters-universe-action-figure-ranked , vaya tela con mossman, el hombre porro, y syklone.
#2 Yo tenia la peonza esa, Rotar si, menudo coñazo, no se mantenia de pie, la goma que le hacia girar se gastaba... realmente no se podia jugar mucho con el.
Stinkor la mofeta que olia a pachuli, al menos este se mantiene de pie...
Que recuerdos, aunque yo era más de los Madelman.
Había uno que olía a mofeta, no me acuerdo como se llamaba. Y era vomitivo, olía toda la casa.
Por eso nunca me lo compraron
https://he-man.fandom.com/wiki/Stinkor
#6 Siempre me pareció curioso cómo una gente con una imaginación capaz de parir un universo que aúne Conan y Star Wars se volviera tan vaga a la hora de inventar nombres.
El de Cristina Cifuentes?
No me creo que no esté el que yo tenía que era verde cesped (con "pelitos" y todo) y al cabo de un tiempo desprendía un mal olor a podrido de acojonar. Al parecer se llama Mossman o algo así.
#10 Lo del olor era una habilidad más: capacidad para transmitir podredumbre, como el dios del caos Nurgle del Warhammer, pero esa es otra historia.
#11 También es posible que, descontando sus poderes, yo de niño lo restregase en cualquier cosa (barro, leche, zumo, fanta...) y fuese bastante guarro al no lavarlo
No recuerdo "por qué" olía mal, sólo que acabó oliendo mal, quizá mi mente censuro el procedimiento
Lo del muñeco cabezón es una de las historias más tristes que he oido.
Menos Mekanek y Merman tuve todos los de la lista (y muchos más). Bufff, qué viejuno soy...