Hace 10 años | Por Astarte a obamaworld.es
Publicado hace 10 años por Astarte a obamaworld.es

Wikileaks llegó y se diluyó. Julian Assange está encerrado en la embajada de Ecuador en Londres. Chelsea Manning -el soldado antes llamado Bradley que pasó los documentos a Wikileaks- estará 35 años en la cárcel.

Comentarios

Astarte

Un artículo imprescindible para ser más conscientes de todo lo que está sucediendo, qué implica y en qué nos afecta. Ya está bien de oír aquello de "que miren lo que quieran que yo no he hecho nada malo"

T

Pues depende: ahora sabemos seguro lo que antes solo presentíamos, que no somos más que peones totalmente prescindibles en una partida llena de reinas* sin escrúpulos.

*digo reinas porque los reyes en ajedrez se mueven menos que el barco de Chanquete, no por otra cosa.

M

#2 En una partida de ajedrez, la reina se come a un peón y el peón diagonal la mataría. Si esto fuese una partida de ajedrez, el rival respetaría los turnos de juego. Respetaría el concepto de "juego". Respetaría al otro jugador. Joder, sin escrúpulos, parece como si tu rival se concediese el derecho de mover tres veces seguidas, te rompiera el tablero en la cabeza, te rociase salsa putanesca por encima, y luego fuera a decirle al público que perdiste al parchís porque eres manco.

M

Snowdens, hay todos los días. Cada vez que un niño chico llora delante de todos porque su padre le da un guantazo, hay un mini-Snowden reclamando atención por una vulnerabilidad de derechos, de integridad, etc.

El punto, es que la gente ve eso, y todo OK. Porque no quieren follones, porque no quieren armar escándalo, porque "para eso está la policía", porque "luego irán a por mí", porque "a mí también me pasó eso y no me ha ido tan mal", porque "no tengo lo que hace falta",...

... al final, uno se encuentra con más razones para excusar lo que se debería haber hecho, que las que defienden lo que hay que hacer.

Luego hay otro refrán, que dice "Obras son amores y no buenas razones". Millones de filósofos en Internet a dar explicaciones de lo que hay que hacer. Pero ¿ellos tienen las herramientas para zanjar el problema? ¿Quién le ha puesto el micrófono y el taburete al que se dedica a aconsejar sobre lo que la gente debería hacer? ¿Lo que cuesta ese micrófono... para cuántas armas daría?