La historia nos lleva a 1993. Tradicionalmente, Virginia era uno de los estados donde era más sencillo comprar armas. Tan simple como entrar a una tienda, enseñar el carnet y pagar. Esto provocaba que los delincuentes de estados menos permisivos, como Nueva York o Washington D.C. usaran esta región abastecerse. Con un solo viaje, los gangsters y mafiosos de la zona volvían armados hasta los dientes.
Me encanta cómo la ficción y la realidad se entreteje hasta formar un magma indistinguible. Sigo desde hace meses las andanzas de Phoenix Jones y otros superhéroes del otro barrio:
Comentarios
Me encanta cómo la ficción y la realidad se entreteje hasta formar un magma indistinguible. Sigo desde hace meses las andanzas de Phoenix Jones y otros superhéroes del otro barrio:
http://blogs.lainformacion.com/strambotic/2011/01/11/superheroes-reales/
#1 No nos vendría mal algún superhéroe por aquí, que está la cosa muy mal!
#2 Superlópez siempre podría venir a salvarnos, o Pafman
#1, la realidad siempre supera a la ficción. Mira sin ir más lejos la última maldad de Lex Luthor en la gran pantalla: hacerse promotor inmobiliario.