No hace falta dirigir la mirada a los glaciares de Noruega, a los incendios de Australia o a las inundaciones en Brasil para ver los efectos del cambio climático. En España también se comienzan a percibir cambios que se multiplicarán en los próximos años. Y no sólo tendrá efecto sobre el clima, también salpicará al ámbito social y económico.
Según el estudio, lo que hará reducir la producción de aceituna en Andalucía sería el descenso de las precipitaciones, algo con lo que (dicho desde la barra del bar palillo en boca) no estoy de acuerdo. Por una parte, porque no está demostrado que el calentamiento global vaya a comportar una clara reducción de las precipitaciones en la Península Ibérica, y por la otra, porque cada vez hay menos hectáreas de olivo de secano, allí donde pueden meten riego por goteo. Y el olivo es un cultivo que con 2-3 regadas al año va tirando.
Otra cosa son las olas de calor más extremas que iremos sufriendo, que eso sí que puede afectar de manera muy negativa a algunas variedades de aceituna durante su maduración. Y más aún las que vengan tempraneras, con el fruto aún pequeño. Quizás habrá que ir plantando variedades más resistentes al calor. O cambiar el olivar por pistachos.
Pues si esto se cumple, el desierto que se avecina va a ser inmenso por la barbaridad que han hecho al destruir los montes para dedicarlos al monocultivo de la aceituna.
Comentarios
Siempre pueden meter mano en la emergente industria del aceite de dátil.
#1 Sino saben diversificar...
Según el estudio, lo que hará reducir la producción de aceituna en Andalucía sería el descenso de las precipitaciones, algo con lo que (dicho desde la barra del bar palillo en boca) no estoy de acuerdo. Por una parte, porque no está demostrado que el calentamiento global vaya a comportar una clara reducción de las precipitaciones en la Península Ibérica, y por la otra, porque cada vez hay menos hectáreas de olivo de secano, allí donde pueden meten riego por goteo. Y el olivo es un cultivo que con 2-3 regadas al año va tirando.
Otra cosa son las olas de calor más extremas que iremos sufriendo, que eso sí que puede afectar de manera muy negativa a algunas variedades de aceituna durante su maduración. Y más aún las que vengan tempraneras, con el fruto aún pequeño. Quizás habrá que ir plantando variedades más resistentes al calor. O cambiar el olivar por pistachos.
Pues si esto se cumple, el desierto que se avecina va a ser inmenso por la barbaridad que han hecho al destruir los montes para dedicarlos al monocultivo de la aceituna.
Eso hará que tengamos que despedir a los temporeros que tenemos "contratados" ilegalmente...
Salu2