Hace 5 años | Por --574090-- a contrainformacion.es
Publicado hace 5 años por --574090-- a contrainformacion.es

Nuestras Cortes Generales están en la dinámica de la interrupción, del jaleo, del discurso vacuo, del insulto permanente, y de la expresión fácil. Están, en una palabra, por no debatir.

Comentarios

skaworld

#2 Y mira que me jode, con Huxley había soma

D

Hemos elegido a unos parlamentarios a golpe de tweet. ¿De qué nos vamos a quejar ahora?

D

Últimamente los debates políticos me suenan a

D

#3 ¿Podrías hacer el favor de explicarme la mierda que acabo de ver?

D

#9 Aquí te lo explican Auxilio me desmayo, cállese viejo lesbiano

Hace 5 años | Por Peachembela a biobiochile.cl
pero es clavado a lo que puedes ver en cualquier sesión de control del gobierno desde hace unos años.
Cuando decían los políticos que debería hablar el lenguaje de las redes, creía que se referían a otra cosa.

Peka

Esto es la consecuencia que han provocado los "moderados". No se pueden tomar decisiones y encima esperar que los afectados no se revelen.

themarquesito

#8 Falta ahora que alguien, al estilo de Figueras, suelte desde la tribuna el "señorías, estoy hasta los cojones de todos nosotros"

Magog

Gabriel Rufian es el claro ejemplo de "inmigrante nazi", me recuerda mucho a algunos familiares que tengo en Estados Unidos, más republicanos que Trump....

andybelcorreo

La difamación pertenece al lenguaje totalitario. El Congreso se convierte en un circo. España se puede ir a la deriva.

Drachenfutter

Han estado en algún momento en una dinámica diferente?

W

#5 Era otro nivel y no solo en las formas.



Fascistas 1 - Golpistas 0

d

#1 Jamás. Ya en tiempos de la Primera República, lo que se cuenta de aquel parlamento era muy parecido a esto.
España (su sociedad) jamás ha tenido cultura democrática. La podría tener, pero es un proceso largo. Mientras tanto, lo que hay son peleas de clanes y de grupos de poder sin escrúpulos, en la que ya no se distingue apenas la justa indignación del insulto gratuito.

M

#1 No, pero eran más finos y educados a la hora de insultar.