Si hace apenas un año, el banco central preveía que la economía española crecería este año un 3,1% de media anual, ahora es muy probable que el Producto Interior Bruto avance hasta situarse en una horquilla situada entre el 2,5% y el 2,7%. Lejos, en cualquier caso, de la estimación oficial del Gobierno, que mantiene contra viento y marea el objetivo de crecer un 3,1% este año.