En España muchos se obsesionan por lo poco que leemos. Son muy pocos los que, en cambio, señalan un problema mucho más desapercibido pero no menos preocupante: el nuestro es un país de analfabetos funcionales. Pareciera como si culpar al público de leer poco no estuviera mal visto y, en cambio, nos diera cosa llamar lerdo al que lo es. ¿Qué es un neolector digital? Se trata de alguien que nunca se hubiera planteado dedicarse a nada parecido a leer y escribir si no fuera por la Internet 2.0. Es un lector por imperativo tecnológico.
Comentarios
No hay más que ver los comentarios en meneame sobre la triste noticia de los policías de Canarias que no aprobaron la prueba de ortografía:
En resumen, muchos dijeron que un policía no se mide porque sepa escribir.
Tuve una compañera de trabajo que leía 3 libros por semana, y ni siquiera le servía para aprender ortografía.
Leer por leer (por parecer lo que no se es) no sirve de nada.
#1 ¿Los leía o decía que los leía?
#4 Los leía. Lo puedo asegurar. Durante dos días se acordaba hasta de la trama, si era una novela.
#5 Pues eso va a ser algún tipo de dislexia. Porque coño, con más de 100 libros al año algo se te tiene que pegar por fuerza.
Yo recuerdo cierto profesor universitario que tuve, que en su primera clase provocó las iras de la parroquia (y el regocijo de algunos) al avisar de que en sus exámenes, a la tercera falta grave de ortografía dejaba de leer. La carrera, por cierto, era de letras
#6 ¿Acaso no conoces a nadie que no pone interés en lo que hace y no se entera de nada? Pues en el caso de los libros, también sucede.
También conozco gente que va a museos como quien pasea junto al río. ¿Tú no?
Mi mejor amigo es Ingeniero Agrónomo, es catedrático de no se qué asignatura, y hace lo mismo. Un universitario no debe ser un analfabeto.
#6 Eso lo hizo una profesora mía de historia en el bachillerato. Cuando nos repartió el examen corregido en clase tuvimos que corregir nuestras propias faltas usando un diccionario para que nos contase la nota si habíamos aprobado el examen. Mi única falta se me quedó grabada a fuego y nunca más la he vuelto a cometer. Le estuve dando vueltas durante toda la hora de clase hasta que la profesora se apiadó de mí y me dijo dónde estaba el error: había puesto hubieron donde iba la forma impersonal hubo
También esta el don de la síntesis y el no andarse por las ramas, aca le dejo mis dies
La verdad es que no sé si me preocupa más el analfabetismo funcional o el digital. Muchas veces me da la sensación de que nos estamos convirtiendo en elois y morlocks. Lo que no tengo claro es quién es quién, pero que se está produciendo un abismo del que habrá que empezar a darse cuenta
Joer, yo soy de los últimos del EGB-BUP-COU y cuando hice la Selectividad ya había un límite de faltas ortográficas. Si las superabas daba igual lo que hubieras hecho en el examen, te suspendían. Y durante COU también seguían el mismo criterio en los exámenes del instituto. Saludos.