Hace 10 años | Por jds a pontevedraviva.com
Publicado hace 10 años por jds a pontevedraviva.com

Con la liberación de Javier Espinosa y Ricardo García, en Siria, el periodismo ha logrado salvar la difícil espina de encontrarse secuestrado más días y horas. Ha vuelto a ganar la batalla a la mordaza. Pero, el periodista sigue siendo un ser público demonizado por sus continuas equivocaciones o manipulaciones para servir a los poderes fácticos. Y esa podría ser una parte de la verdad que refleja que, como en todas las profesiones, hay buenos y malos profesionales. El alegato del buen periodismo también existe y se práctica.