Hace 9 años | Por xpadim a revistagq.com
Publicado hace 9 años por xpadim a revistagq.com

El famoso “¿Te puedo invitar a una copa?”, tan manido y peliculero, acaba de cobrar una nueva dimensión. Aquí en GQ, que somos los científicos del amor, seguimos con nuestra obsesión empírica de conseguir la fórmula perfecta de las relaciones, la teoría del romance. Y en este caso, nuestras medicinas se miden en mililitros, vasos largos, chupitos y mucho hielo. Aún así y como servicio público, vaya por delante esta guía GQ sobre los perfiles a tener en cuenta con su bebida favorita. De nada.

Comentarios

CTprovincia

Muy divertido. ¿Por qué tanto negativo?

"DRY MARTINI
Diagnóstico: Salvaje de trago largo.

Instrucciones: Hazte suyo.

(Variación hardcore del Dry Martini) Sí cuando le sirven el Dry Martini, acto seguido se come la aceituna y se lo bebe de un trago mientras te mira fijamente a los ojos, entonces te dirá “No sabes nada Jon Nieve”, tendrás sexo despiadado y por la mañana, cuando ¡Oh, Jon Nieve! sepas algo más, te clavará un par de flechas mientras te vas.
"

lol lol lol

karakol

Christina Hendricks... mmmhh.

onnabancho

Si quieres pagarme una bebida desde la inmensa generosidad de tu corazón (ja, ja, ja) lo que voy a pedir es lo más caro que tengan en el bar y luego decir "oye, pues ha sido divertido. Me voy y eso. ^__^"

Si quieres pagar por follar hay gente que se dedica a eso profesionalmente.

Mister_Lala

El rigor científico del artículo es cero, pero lo que me he reído con el término "follafantas".