Hace 9 años | Por ewok a gciencia.com
Publicado hace 9 años por ewok a gciencia.com

En un futuro próximo, el cerebro podría transfigurarse en un órgano tecnológico e integrarse en el catálogo de las tecnologías intelectuales, conectándonos en red mediante la implantación de biochips. La implicación más aterradora de esta tecnología es la grave posibilidad de que facilitaría el control totalitario de los seres humanos más allá de lo retratado por Orwell, como señalan Maguire y McGee. George J. Annas, director y profesor del Departamento de Derecho de la Salud, de Bioética y de Derechos Humanos de la Universidad de Boston.

Comentarios

ewok

Con este envío pretendía crear debate, me parece un tema alucinante, pero bueno... vaya fracaso!!