Hace 9 años | Por Er_Pashi a eldiario.es
Publicado hace 9 años por Er_Pashi a eldiario.es

Las recomendaciones del reciente informe sobre política de I+D incluyen dos medias estrella: incrementar el gasto público al 0.7% del PIB y desfuncionarizar la I+D. La primera supone un retroceso en los objetivos de financiación trazados por la UE hace mas de una decada (3% del PIB en 2010) y asume una contribución poco realista de la financiación privada. La segunda resultará contraproducente si no se establece primero un control estricto del nepotismo, la endogamia y el conflicto de intereses.

Comentarios

Gilgamesh

Buen post. Mi opinión:

-No debemos tener miedo a "desfuncionarizar" la I+D y a pedir a los investigadores que rindan cuentas.
Primero, porque al fin y al cabo, a los investigadores ya se les pide cuentas de todos modos, y de qué forma, en sus respectivos proyectos. No conozco a ningún investigador trabajador y honrado que tenga miedo a que le pidan cuentas.
Segundo, porque de todas formas la I+D no está "funcionarizada", en el sentido de que sólo una fracción de la investigación en España la realizan funcionarios. La gran mayoría de la I+D la realizan doctores o doctorandos en situación precaria cuyos contratos son temporales y no siempre bien pagados (800 € puede ser el sueldo mensual para un doctorando). A veces hablas con la gente, mal informada, y se piensa que todos los científicos tienen contratos de por vida, cuando en realidad vamos saltando de contratito a contratito, muchas veces en distintos países
Así que, por mi parte, que "desfuncionaricen" la I+D si quieren, pero eso sí, que antes metan mano al sistema de contratación y promoción de investigadores en facultades y departamentos, que ahí tenemos el verdadero cáncer, y cumplan con el autoimpuesto criterio de meritocracia. Que se vigile eso. Puestos a pedir, estaría genial que de una vez por todas a alguien se le ocurriera definir la carrera investigadora. Luego ya que desfuncionaricen lo que les parezca.
Todo esto va en la línea del post.

-Eso de reducir la inversión pública y esperar que mágicamente la asuma la iniciativa privada, como también dice el post, es tan pueril que hasta produciría ternura, si no hablásemos de un tema tan serio como este.